diferencia, Una de las prácticas primordiales dentro de un trabajo estético de liberación, vinculado en un primer nivel con una aesthesis de la liberación, es el restablecimiento, la re-versión, el retorno o "giro" hacia la fuente de realidad cósmica, siempre dentro de un mundo cultural esencialmente comunitario, fundamentada sobre la lógica de la presencia, de la pertenencia y participación (en contraposición y tensión crítica con la "representación/inclusión" del "orden clásico del saber" (Foucault, 2002) y el ego conquiro previo al cogito cartesiano, en tanto fundamentos de la episteme moderno-occidental (Dussel, 2008)). Este "vuelco" (Umschalg o Kuty) se interpela cuando el "mundo/cultura", en este caso del orden epistémico moderno (emplazado fundamentalmente a través del sistema capitalista, el orden político-jurídico liberal y la estética moderna de lo bello y lo sublime), se fetichiza predominando en la producción de sentido de la cultura la racionalidad "medio-fin" por sobre la "vida-muerte" (Hinkelammert, 1984: 239), identidad
الوصف:
Una de las prácticas primordiales dentro de un trabajo estético de liberación, vinculado en un primer nivel con una aesthesis de la liberación, es el restablecimiento, la re-versión, el retorno o “giro” hacia la fuente de realidad cósmica, siempre dentro de un mundo cultural esencialmente comunitario, fundamentada sobre la lógica de la presencia, de la pertenencia y participación (en contraposición y tensión crítica con la “representación/inclusión” del “orden clásico del saber” (Foucault, 2002) y el ego conquiro previo al cogito cartesiano, en tanto fundamentos de la episteme moderno-occidental (Dussel, 2008)). Este “vuelco” (Umschalg o Kuty) se interpela cuando el “mundo/cultura”, en este caso del orden epistémico moderno (emplazado fundamentalmente a través del sistema capitalista, el orden político-jurídico liberal y la estética moderna de lo bello y lo sublime), se fetichiza predominando en la producción de sentido de la cultura la racionalidad “medio-fin” por sobre la “vida-muerte” (Hinkelammert, 1984: 239).